Fomentar la seguridad vial y el tránsito vehicular ordenado son temas de Agenda País y uno de los principales retos con miras al bicentenario nacional. Experiencias de otros países señalan que las acciones educativas y de prevención en temas de seguridad vial, desde temprana edad, contribuyen a formar ciudadanos, conductores y peatones más responsables. 

Toyota busca promover buenas prácticas de conducción y de seguridad vial niños y adultos para así contribuir a la formación de una nueva generación de conductores responsables. 

En ese sentido, en el marco de su participación en el evento “Autópolis: La evolución de las grandes marcas del Perú”  comparte 4 recomendaciones para incentivar la cultura vial en los niños y niñas del Perú.

1. DAR EL EJEMPLO COMO PADRES: Los padres son los principales modelos a seguir para los niños y también sus primeros referentes en su proceso de aprendizaje, por lo tanto deben dar el ejemplo con sus acciones en la vía pública (sea como peatón, conductor de un vehículo, pasajero de un bus o como copiloto).

2. ENSEÑAR COMO JUGANDO: Una de las mejores herramientas para que los niños puedan conectar e interiorizar contenidos es a través de los juegos. En casa improvisa un juego de “roles” con diversos escenarios y circuitos de tránsito. Como peatón, como conductor de un vehículo o como copiloto; para cada uno asigna unas funciones y reglas que deberán realizarse, intercambia roles y al final de cada situación da una moraleja. Además de educar tendrás un momento muy agradable con tu hijo.

3. APRENDER DE DISTINTOS ESCENARIOS: Ya sea que estemos dentro del auto o en un autobús, los padres tienen que aconsejar a sus hijos sobre su comportamiento, indicándoles que deben mantenerse sentados para estar seguros y no distraer al conductor cuando el coche está en movimiento. Por otro lado, como peatones, recordarles siempre que reconozcan las señales de tránsito y que consideren solo las líneas peatonales como el único camino permitido para cruzar.

4. APROVECHAR EL CAMINO: El tiempo que pases con tus hijos de camino a casa, al parque, o a su colegio, puede ser aprovechado para enseñarles en la práctica sobre las señalizaciones de tránsito y el significado de los colores del semáforo en cada parada o cruce de calle, permitiendo fomentar un aprendizaje mediante la experiencia.