Emprender un negocio es una alternativa cada vez más atractiva para los jóvenes incluso desde sus primeros años de educación secundaria. Según el último informe del Global Entrepreneurship Monitor (GEM), Perú mantiene una de las tasas más altas de actividad emprendedora al ubicarse en el 6° lugar, de 64 economías, con 25%. De esa cifra, 17% está conformado por emprendedores de entre 18 y 24 años de edad. 

Si además consideramos que el Estado y otras instituciones privadas promueven el emprendimiento desde el colegio no debería sorprendernos que nuestros jóvenes hayan visto en iniciar un negocio propio una atractiva alternativa de vida.

En el marco del 12° Premio Citi a la Microempresa que pronto dará a conocer al ganador del premio “Joven Emprendedor”, Aprenda y Fundación Citi comparten consejos para que los padres de familia puedan orientar a sus hijos emprendedores.

FELICÍTALO Y FELICÍTATE TÚ TAMBIÉN: Cuando nos enteramos de que nuestros hijos quieren ser emprendedores nuestra primera reacción como padres es la negación. No es que no queramos verlos felices conduciendo un negocio pero nos asusta la idea de que puedan fallar y, buscando protegerlos, tratamos de hacerlos desistir de la ‘loca’ idea de ser empresarios. Tranquilo. Si tu hijo tomó la decisión de ser “empleador en vez de empleado”, felicítalo y felicítate tú mismo porque o bien siguió tu ejemplo ya que tú también eres emprendedor o bien lo has formado como una persona independiente y proactiva que no está esperando que alguien más le resuelva la vida.

ESCÚCHALO Y ORIÉNTALO PARA TOMAR UNA DECISIÓN. Es importante que escuches con detalle la idea de negocio de tu hijo. No te opongas de plano a la idea de que emprenda sin antes haberlo escuchado. Conversa con él sobre el modelo de negocio, ayúdalo a analizar su viabilidad y oriéntalo para que tome una decisión sobre si debería llevarlo adelante. Te podrás llevar una grata sorpresa.

AYÚDALO A PLANIFICAR: La planificación es fundamental al momento de iniciar un negocio; anímalo a que investigue el mercado preguntándole a los posibles clientes y conociendo a su competencia. Recomiéndale, por ejemplo, que tome un negocio ya existente como referencia y busque mejorarlo por completo. Las redes sociales son excelentes aliadas en esta etapa ya que le permitirán a tu hijo buscar información y tomar contacto con otros emprendedores sin tener que salir de casa.

RECOMIÉNDALE CAPACITARSE: Muchas veces tienes la intención de apoyarlo pero no cuentas con las herramientas necesarias para hacerlo. Te recomendamos que busques talleres, conferencias y otros espacios de capacitación para jóvenes emprendedores que ayuden a tu hijo a mejorar su plan de negocio. Por otro lado, estos eventos son un buen espacio para que conozca a otros jóvenes emprendedores como él y aprenda de sus aciertos y errores.

CUIDADO CON EL FINANCIAMIENTO: Si estas en la posibilidad de apoyarlo con el capital inicial no dudes en hacerlo. Sin embargo, recuerda que este monto será un préstamo y no un regalo. Por ello, bríndale modalidades de pago con una tasa de interés simbólica que le enseñe a tu hijo a cuidar el dinero. Si tu hijo opta por tomar un crédito en una entidad financiera, acompáñalo y analicen juntos la mejor alternativa comparando, por ejemplo, qué entidad les ofrece la cuota más baja por un mismo monto otorgado a un mismo plazo de pago.

BUSQUEN ALIADOS: Enséñale a tu hijo que solo se va más rápido pero junto a otros se llega más lejos. Anímalo a elaborar una lista de potenciales clientes (al principio podrán ser familiares, luego amigos, etc.) así como profesionales que pueda ir necesitando su negocio conforme vaya creciendo.

PREPÁRALO PARA EL FRACASO: Conversa con tu hijo sobre la posibilidad de que su idea de negocio no resulte tan exitosa como la planificó. Recuérdale que equivocarse será siempre parte del camino del emprendedor y que, si se equivoca, deberá analizar sus fallas y volver a intentarlo. ¡No lo desanimes!