Mientras en algunos lados de Lima, en verano las piscinas rebozan de agua, en otros hay familias que no cuentan con una conexión domiciliaria y que se ven obligadas a pagar más de 15 veces por metro cúbico de agua respecto a una familia que sí tiene el servicio. Es por ello que las declaraciones del presidente del Consejo Directivo de la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (SUNASS), Fernando Momiy Hada, son importantes.

"Invertir en agua y saneamiento debe ser una prioridad porque no sólo pasa por disminuir los altos costos que asumen las familias que no tienen el servicio sino que impacta directamente en la calidad de vida de la gente, pues reduce las enfermedades gastrointestinales y se recupera el tiempo de acarreo de agua de los padres de familia para dedicarse a otras labores y de los niños para que vayan a la escuela”, comentó Momiy. 

En este sentido, indicó la importancia de fortalecer las empresas prestadoras de los servicios de saneamiento (EPS) no sólo dotándolas de recursos para construir infraestructura sino mejorando sustancialmente su capacidad de gestión, invirtiendo en capital humano y generando alianzas para mejorar eficiencias e ir avanzando sosteniblemente en el cierre de la enorme brecha sectorial que supera los S/. 56 mil millones, de acuerdo a estimaciones gubernamentales.

Momiy sostuvo que frente a la propuesta del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento de reformar la gestión de las EPS mediante la concesión de los servicios vía iniciativas privadas, asociaciones públicos- privadas y mecanismos fiscales como obras por impuestos, el sistema regulatorio que implementa SUNASS está preparado para complementar estos esfuerzos.

Recordó que SUNASS vela por el equilibrio de los intereses de las EPS, el Estado y el usuario. “El Organismo Regulador es un mitigador de riesgos para las partes contratantes y a través de distintas acciones garantiza el cumplimiento de los contratos de concesión”, enfatizó.